Se acabó la practica.
Los Cabros chicos del jardin nos tenian preparada una oncesita increible.
Los apoderados se pusieron con bebidas, queques, suflés, ramitas y una larga lista de productos aceitograsosos.
Lo pasamos increibles y me gane un abrazos de cabros chicos, de 30 cabros chicos.
La foto la tomo el Robert Navarro, 5 años.
Por ahora ultra ocupado, entretengase lea a
CLAP.